|
LA GRAN CRUZADA DE LA MISERICORDIA
Jesús se presenta como quiere que se le
conozca y lo que espera de nosotros.
Testimonio de
Catalina

» Prólogo
» Introducción
LOS MENSAJES:
1 » Tiempo de Misericordia
2 » Tú Eres Libre de Elegir
3 » Identifícate Conmigo
4 » Sé Misericordioso y Ama
5 » La Contemplación: Vida del Alma
6 » Reconoce Tu Pecado para Obtener Misericordia
7 » La Medalla del Apostolado de la Nueva Alianza
8 » Pido que se Consagren a los Sagrados Corazones
8a » ORACION:
Consagración a los Sagrados Corazones
9 » Conozco los Incentivos Más Profundos del Corazón Humano
10 » Esposas, Madres, Salven a Sus Familias
11 » Apóstoles de la Nueva Alianza: Amen
12 » Nueva Evangelización
13 » Les Doy Mi Amor
14 » Búsquen Primero el Reino de Dios
15 » Permanezcan Cerca de Mí
16 » Transforma Tu Sufrimiento en Alegría
17 » La Oración Estremece Mi Corazón
18 » No se Desanimen en las Dificultades
19 » Sean Pacientes y Humildes
20 » Sean Obedientes
21 » Todo es Posible para el que Cree
22 » Conoce el Verdadero Amor
23 » Amame sobre Todo
23a » Oración:
Amame sobre Todo
24 » Unanse a Mi Corazón Eucarístico
25 » El que Ha Recibido Mi Perdon, Olvide Su Pecado
26a » Dios es Introducido en la Humanidad a Través de María Parte 1 de 4
26b » Dios es Introducido en la Humanidad a Través de María Parte 2 de 4
26c » Dios es Introducido en la Humanidad a Través de María Parte 3 de 4
26d » Dios es Introducido en la Humanidad a Traves de María Parte 4 de 4
27a » La Semilla Indestructible de Mi Palabra Parte 1 de 2
27b » La Semilla Indestructible de Mi Palabra Parte 2 de 2
28 » Escucha a Mi Iglesia y Obedécela
29 » José, Patrono de la Buena Muerte
30 » Jesús Jardinero
31 » Renunciar al Mundo
32 » Sé Mi Samaritano
33 » Bienaventurados los Pobres de Espíritu
34 » Venzan al Tentador
35 » El Señor a Su Madre
36 » Sé Auténtico
37 » La Dignidad que Yo les Confiero
38 » Las Espinas Son Parte de la Flor y el Fruto
39 » Aprende a Hacer Mi Voluntad
40 » El Nombre de Mi Madre
41 » Mi Divino Querer
42 » Abandonen la Infancia Espiritual
43 » Tu Alma es una Pequeña Estrella
44 » El Elegido Debe Actuar Conmigo
45 » Trato al Alma con Extrema Destreza
46 » El Arcángel San Gabriel
47 » Quiero Estar Entre Ustedes, No en Altares Llenos de Polvo
48 » La Noche de Belén
49 » María Participa de Mi Divinidad
50 » Ardan con el Fuego que Quiero Darles
51 » Yo Soy la Resurrección y la Vida
52 » Me Agrada Quien Persevera en la Oración
53 » Ora por Quienes Te Dañan
54 » Mi Escuela
55 » He Puesto Mis Ojos en Ti
56 » Mi Amor Divino se Abaja a Hablarles
57 » Yo Soy el Pan de Vida
58 » Yo Cultivo Su Terreno y lo Limpio de Malezas
59 » Santa Locura el Recibir una Bofetada y Presentar la Otra Mejilla
60 » El Mérito lo Doy Yo
61 » La Eucaristía, Sacramento de Mi Amor
62 » El Paraíso Es Vuestra Meta
63 » Oren por las Almas del Purgatorio
64 » Oren con Humildad
65 » ¡Crean en Mí y Satanás Será Derrotado!
66 » Quiero que Todos Me Reconozcan como Madre
67 » Quiero Salvarte
68 » La Cruz Prepara Su Salvación
69 » El Grano de Trigo Debe Germinar
70 » Mi Querer y Mi Pensamiento Son Mis Leyes
71 » Acepta con Amor lo que Te Doy
72 » Yo Hago de Imán en Tus Adversidades, Sígueme
73 » Quien Me Sigue No se Equivoca, lo Preservaré del Engaño
74 » Mi Madre: Coronada de Gloria
75 » Yo Cultivo con Cuidado Amoroso Mi Jardín
76 » Yo Acaricio Tu Alma
77 » Vengan a Mi Corazón Deseoso de Ustedes
78 » Soy Mendigo de Corazones
79 » El Amor es Su Bien Presente y Futuro
80 » El Getsemaní es un Océano de Caridad
81 » El Amor de Dios lo Movió a Hacerse Criatura de Sus Criaturas
82 » Angeles, Acudan y Defiendan a los que Me Aman
83 » Yo Estoy Sobre Todos Tus Afanes
84 » Yo Soy el Mar, Ustedes los Granos de Arena
85 » Quien Me Sigue No Camina en Tinieblas
86 » Elegidos, Aférrense a la Mano de Mi Madre
87 » Yo Soy la Vid, Ustedes los Sarmientos
88 » Quiero Vivir en el Hombre
89 » Debo Hacer un Gran Fuego y Quiero Servirme de Ti
90 » Jesús Hace Ricos a los Que Se Reconocen Pobres
91 » Yo Soy el Buen Pastor
92 » No Quedaré Insensible a Sus Reclamos
93 » Soy Yo El Que Te Estrecha a Mí
94 » Yo Soy el Perdón, Quiero Verlos Limpios
95 » Judas Podía Salvarse Si Hubiese Creido en Mi Amor Misericordioso
96 » El Desapego de las Cosas Habilita para Amar a Dios
97 » Pocas Almas se Compadecen de Mi Agonía
98 » La Humildad es un Acto Interior de Sumisión
99 » Mi Corazón: Horno Ardiente de Amor
100 » Han Nacido de Mí y a Mí Deben Retornar
101 » Que el Amor Encienda la Llama en Ti
102 » Quiero Poner en Ti Fuego de Caridad
103 » El Santiguarse Es un Acto de Fe y de Amor
104 » Permanezcan Commigo, Oraremos Juntos
105 » Mi Iglesia Es Testigo de Mi Evangelio
106 » Alivia Mis Sufrimientos
107 » Mi Doctrina Es Santa, Mi Yugo Es Suave
108 » Cuando Yo Haga de Ustedes la Violeta, el Lirio, la Rosa que Quiero
109 » Miren con Afecto al Crucifijo
110 » Dirígete Siempre con el Corazón y la Mente a Mí
111 » Espero que Todos Vengan Junto a Mi Jesús
112 » Lo que Es para los Hombres Estimable, Es Abominable ante Dios
113 » Todos Tropezarán Conmigo
114 » ¡Madre de Jesús: Dios Sea Bendito! ¡Jesús: María Sea Bendita!
115 » Persigue Tenazmente la Belleza de Amar
116 » Con la Oración se Adquiere el Espíritu de Penitencia
117 » Vigilia de Pentecostés
118 » Por Ustedes Accedí de Corazón a Hacerme Víctima
119 » Permanezcan Lejos de Toda Ofensa Contra Mí
120 » Desde la Hostia los Miro con Amor
121 » No Teman ante las Dificultades
122 » Conmigo Tendrán Todo lo que Yo Poseo
123 » Aprecio la Humildad
124 » En el Sufrimiento el Amor por Mí Crece, a Medida que Creen
125 » Toda Muerte Lleva Consigo el Gérmen de Otra Vida
126 » La Sangre de los Mártires Fue Semilla Fecunda
127 » Los Ilumino Siempre, Aun Cuando No lo Advierten
128 » Soy la Luz del Padre
129 » Les Ofrezco el Refugio de Mi Corazón
130 » El Camino Es la Renuncia a los Atractivos
131 » Te Elegí y Ahora Eres Mío
132 » Ser Pastor Significa una Sola Cosa: Dar la Vida
133 » Entréguenme Su Absoluta Confianza
134 » Soy Auxilio de Todos los Cristianos
135 » El Unico Nombre que Merece Ser Invocado y Amado Es el de Jesús
136 » Fiesta de la Santísima Trinidad
137 » María Engendró No Solo al Hombre, Sino También a Su Dios
138 » Vengan a Mí, Hay Consuelo para Todos
139 » Te He Elegido Desde la Eternidad
140 » Con la Eucaristía Háganse Faros de Luz de Mi Pueblo
141 » Soy Alimento para Sus Almas, Soy Verdad para Sus Mentes
142 » Mi Presencia en la Hostia Consagrada Es el Acto Más Grande de Misericordia
143 » Ninguna Cruz Llevada con Amor Merecerá Desprecio
144 » Muchas Cruces Son Hechura de Ustedes Mismos
145 » Felíz el Alma que Quiera Completar Mi Pasión
146 » Felíz el Alma que Quiera Completar Mi Pasión
147 » Amar No Es Encerrarse en el Círculo de los Propios Sentimientos
148 » Mi Lenguaje Cansa a los Egoístas
149 » Son Pocos los Corazones Sinceros Conmigo
150 » El Sufrimiento los Prepara al Gozo Eterno del Mañana
151 » Oh, Si Supieran lo que Les Ha Preparado Su Señor! Parte 1
152 » Derramo Torrentes de Luz y Amor Sobre Ustedes
153 » Día del Sagrado Corazón de Jesús
154 » Las Llamas del Amor Misericordioso
|
29» José, Patrono de la Buena Muerte
Autor: Catalina Rivas | Fuente: www.LoveAndMercy.org
CM-29 27-Mar-97 Jesús
1) A medida que pasaban los años, se acercaba Mi
hora y a ella Me aprestaba con toda dedicación. Pero
antes debo mencionar a Mi amado José que debía
precederme.
2) Su última etapa de vida terrena, José la
transcurrió serenamente. Pero, al término de los
cincuenta años, se enfermó seriamente. Sus manos no
podían ya sostener los objetos, el hombro izquierdo
estaba entumecido. Tenía artritis y los intensos
cuidados que se le daban no sirvieron de mucho. Mi
Madre y Yo lo asistíamos amorosamente, pero Mi
Padre lo llamaba desde el cielo y por eso todo fue
inútil. Lo que podía hacer por El era aliviarle el mal
cuando se hacía más agudo, pero no siempre lo
hacía. Así, el corazón, largamente probado, no
resistió y al cabo de un tiempo José llegó a su fin en
la tierra.
3) Es verdad, El estaba preparado para partir porque
en Su alma habían madurado los frutos que Yo
quería para El. Le faltaba sólo uno y lo maduraría en
el mismo acto de morir.
4) Mi amado José, después de tantas fatigas,
cuidados, temores y tanta cosa, merecía que Su
Tránsito ocurriese con el consuelo de Mi Presencia…
5) No ocurrió así, El expiró en brazos de Mi Madre,
sola mientras Yo había ido a orar por El. ¿No les
gusta que haya sido así? Sin embargo, fue del agrado
de Mi Padre y también del Mío. José es el Patrono de
la Buena Muerte, porque en ella El fue consolado por
María, que Me representaba también a Mí. Pero
sobre todo, es Patrono de los Moribundos porque al
morir hizo Su más grande sacrificio aceptando
plenamente el Divino Querer, que Me tenía lejos de
El físicamente. ¡Cuán hermosa fue la aceptación de
José al momento de morir! Justamente porque aceptó estar separado de Mí. El que tanto Me amaba, ha
tenido el poder de allegarme a los moribundos que lo
invocan esperando Su ayuda. Porque deben saber
que a Mis Santos les doy el poder de intervenir
benéficamente en las cosas en que ellos fueron más
probados.
6) Mi Madre y Yo dispusimos lo necesario para la
sepultura en un lugar que se encontraba al oriente de
Nazaret, en las cercanías de la colina donde ahora
hay un templo dedicado a San José. Su cuerpo ya no
está en la tierra, sino que vive en el Cielo donde lo
conduje Yo después de Mi Resurrección. El, en
efecto, volvió a tomar Su cuerpo cuando Me presenté
en lo que ustedes llaman Limbo y permaneció Conmigo, feliz y glorioso, hasta el día en que subí al
Cielo junto con todos los otros que estaban en espera
de Mí en el mismo Limbo.
7) María, después de la muerte de José, se dedicó enteramente a Mí. A Su sostenimiento material
proveía Yo continuando el oficio de José y Ella
ganaba algunas monedas bordando, confeccionando
encajes para la gente que se encargaba del Templo o
para alguna novia.
8) En aquel tiempo volvimos a Jerusalén
peregrinando como simples fieles. Pero iba a llegar
Mi hora y Yo tenía delante la obra para la cual había
venido y que constituía la premisa necesaria para su
redención. Por ello, se hicieron más frecuentes la
soledad y la oración.
9) En unión con Mi Padre comencé entonces el gran
retiro del cual debía volver lleno de celo para la
misión que tenía que llevar a cabo. Puse todo el
cuidado, para presentarme a los hombres que Me
habrían de seguir y que en el futuro habrían de creer
en Mí. Estaba pronto, era la hora, pero antes de
comenzar quise vencer a un enemigo que desde
hacía tiempo quería vencerme a Mí.
10) Para darse cuenta de las tentaciones que quise
afrontar, deben saber que Satanás a oscuras de Mi
Divinidad maquinaba su plan, sus redes. Se
admiraba de que hasta entonces no se le haya
concedido tentarme, porque en Mí, repito, veía
solamente a un hombre.
11) Al término de Mi retiro, tuvo el permiso de
tentarme y comenzó, como ya saben, cavilando en
torno a Mi hambre. Las piedras podían convertirse
en pan, pero la Palabra de Mi Padre era no tocar
alimento. Por eso hablé al tentador como se merecía.
Satanás debía rendir cuentas de su pecado por el cual
cayó. Y su pecado fue precisamente combatir no sólo
la Divinidad de Mi Padre, sino también negar que un
día el Hijo pudiese asumir la naturaleza humana.
Estas fueron las causas de la caída de Satanás. No
quiso aceptar ser menos que un hombre. La Palabra
de Dios lo irritó y lo puso furioso. De modo que,
cuando le respondí que se puede vivir no sólo de
pan, sino de toda Palabra que viene de Dios, le
reproché también su inicial rebelión a la Palabra de
Dios. Pero el mezquino volvió a la carga y Me
propuso arrojarme de lo alto del Templo.
12) ¿Debía Yo mostrarle Mi Poder? No, tanto más
que cuando debía ser expulsado del Paraíso, trató de
cambiar su miseria, pidiéndolo poder ofrecer su
fuerza y su inteligencia para inducir a los hombres a
adorarme cuando Yo llegase a la tierra. El, miserable
y malvado, Me tentó a Mí, su Dios, ofreciéndome sus
bajos servicios. Pero le respondí en el desierto: "¡No
tentarás al Señor tu Dios!"
13) Finalmente, Satanás, viendo inútil rebelarse
contra Mí —en su primera caída— viendo inútil el
tentarme del modo que He descrito, habría querido
ponerse él mismo en Mi lugar y ser adorado.
14) Y así, en el desierto, tuvo la respuesta por
entonces que tentaba a Mi Humanidad y por su
primer pecado. Tuvo la respuesta de un Hombre, del
mismo Hombre que él, Satanás, no quería que
viniese al mundo. Y ésto fue su terrible castigo,
porque en Mis respuestas sintió claramente que no
eran sólo por el momento, sino que apuntaban
también a su caída del Cielo.
15) ¡Cuánta miseria, cuánta soberbia en el
desdichado ángel que se rebeló! Reflexionen y
comprenderán mejor sus astucias. El, en efecto, es el
espíritu que niega, que confunde, con toda malicia y
que quisiera, aparte de Mí, a Mi grey. Me tentó a Mí,
los tienta también a ustedes. Por soberbia hizo guerra
a Miguel y fue derrotado; por odio engaña a quien le
escucha; por envidia desprecia y hace despreciar a
Mis ovejas.
16) Pero Yo He dicho que éstas conocerán Mi voz y
por eso He garantizado que, si siguen siendo Mías
las ovejas que He escogido, no se confundirán.
Tendrán vicisitudes, altos y bajos, luz y tinieblas,
pero Me reencontrarán con la confianza, con la
constancia, con la paciencia.
17) Yo, que Soy su Redentor, He querido tener
contacto con nuestro enemigo común y lo He
vencido, no precisamente porque en Mí está la
Divinidad sino simplemente como Hombre. A su
falaz presunción He opuesto la Sabiduría de Mi
Palabra, es azote terrible para Satanás. Ustedes deben
hacer otro tanto; pero es lógico que, si no conocen Mi
Palabra delante del rebelde, serán débiles y estarán
desarmados.
18) Ahora debo hablarles de Mi Bautismo. Juan lo
instituyó por inspiración divina y Yo Me serví de él
para instruirlos. Las aguas del Jordán fueron usadas
por Caín para lavarse cuando se manchó con su
delito y Yo, al sumergirme en ellas, sentía
sumergirme en las sucias aguas de todo hombre. Por
eso dije a Juan que convenía que él Me bautizase y
que Yo Me dejara bautizar. Mi intención era tomar el
pecado de Caín y en él todos los pecados.
19) Pero Mi Padre, viéndome así humillado, Me
alabó en alta voz, de manera que todos los presentes
quedaron asombrados. E inclusive el Espíritu Santo,
descendiendo en forma de paloma, hizo visible la
aceptación divina, simbolizando la paz entre el
hombre y Dios. Juan tuvo el testimonio que le había
sido prometido y Me reconoció en seguida, aunque
también él ignoraba estas cosas. Muchas acciones y
cosas Mías eran símbolos y de ellos Me servía para
unir Cielo y tierra.
20) Cuando llegué el Jordán Me confundí con los
demás, pero cuando quise volver, Juan Me entretuvo
afectuosamente. Me declaró que su misión había
terminado pero Yo le dije: "No todavía, Juan; debes
dar testimonio de la Ley divina y dar la vida por el
pueblo". Juan no entendió de inmediato, pero
después se persuadió de ello y Yo rogué al Padre
para que su obra se llevara a cabo del modo
establecido. Pero no fue ésta la primera oración que
hice por Juan. Mi Espíritu lo seguía y lo guiaba desde
que él saltó de gozo en el seno materno al saludo de
Mi Madre.
21) Quiero hacerles una aclaración: Yo He alabado al
Bautista, pero eso no significa que Me amó más que
Mis Apóstoles, más que el otro Juan y que Yo
prodigué más gracias al Bautista. El Evangelista Juan
Me siguió, el hijo de Zacarías no. ¿Cómo pueden
decir que es superior a los Santos que Yo He formado
en la Nueva Alianza? Oh, niños ingratos, ¿qué no
saben ni siquiera leer bien el Evangelio?
22) Cuánto daño se hacen a ustedes mismos y a los
demás. Pero si no entienden que el Bautista, si bien
fue muy grande, fue el más pequeño del Reino de los
Cielos, al menos creerán que hacer de Embajador es
mucho menos que hacer de Vicario. El que hace Mis
veces es superior al que Me señala, ¿verdad? La
dignidad de un Vicario Mío es ciertamente superior a
la del querido Juan, hijo de Isabel. Juan es el último
hombre que dio el Antiguo Testamento y es
realmente el primero de todos en el reino de Israel.
23) Cumplida Mi vida en parte de lo que debía hacer
en unión con Juan, se dirigió a los nuevos Andrés,
Pedro, Santiago, Juan y los otros.
24) No quise Conmigo, en la intimidad, a los que
estaban contaminados con el espíritu de la Sinagoga,
porque debía hacer todo por fuera de ella. ¿Qué ayuda podía tener de tantos orgullosos?
25) Comencé a obrar justamente donde la sencillez
era la norma, rehuyendo siempre las almas de los
soberbios. Para pescar a los hombres, no se requiere
tanto ser cultos, cuanto ser Mis amantes. Y es muy
cierto que los mayores obstáculos a la expansión de
Mi Reino están donde mayor es la cultura,
acompañada o no de Mi Gracia. ¡Feliz Pedro, feliz
Andrés y todos Mis Santos Apóstoles! Felices porque
conocieron la ciencia divina ignorando la humana. Y
si bien Yo no condeno el ejercicio de la mente,
cuando está dedicada a una buena causa intelectual,
Me duele que usen aquel don para, muchas veces,
desmenuzar Mi obra y ridiculizar Mi Iglesia.
26) Todos Mis Apóstoles, menos uno, eran sencillos
y puedo asegurar que con ellos Mi Corazón estaba
satisfecho. Trataban con ellos con plena familiaridad
y recibía todas las confidencias que querían hacerme.
Al igual que las palomas toman agua con su pico, los
Apóstoles tomaban de Mí todo lo que necesitaban,
permaneciendo cada vez más halagados,
abandonando al fin todo por Mí.
27) Antes He hecho una excepción que vale la pena
subrayar. Judas Iscariote no era sencillo y sin
embargo lo escogí, lo llamé tal como llamo a todos
los que desearía salvar. Efectivamente, no llamo en
previsión de la aceptación que tendrá Mi llamada,
porque en tal caso Mi amor no sería perfecto. Yo
llamo porque quiero dar a todos Mi amor aun
cuando preveo la condenación de muchos. Pero por
cada rechazo que recibo, estoy seguro que encontraré otro ofrecimiento.
28) He tratado a Judas con el mismo amor con que
trataba a cualquiera de ellos; le di el poder de tener
imperio sobre los demonios como a Mis demás
Apóstoles; lo He mirado, no como a Mi delator y
traidor, sino como al elegido de Mi Corazón, al alma
por salvar.
29) ¿Quién puede decir que no lo amé? ¿Quién
puede dudar que lo elegí para redimirlo y no para
hacerme matar por él?
30) ¡Mis Amados Apóstoles! Todos Me fueron
amados, a todos los amé y a todos los amo todavía,
aun cuando ahora uno de ellos continúa odiándome
en brazos de Satanás. Por eso, durante Mi vida
mortal oré mucho por ellos, velé sobre sus almas, los
instruí como una madre instruye a sus pequeños.
¡Felices los que saben imitarlos, que quieren ser
instruidos por Mí, que no rehusan Mi Amor, que
dejan sus cosas para seguirme! ¡Felices porque Me
encontrarán a Mí lleno de comprensión, de atención,
de alegría!… ¿Tendré que contentarme con
seguidores tibios, almas desalentadas y pocos, muy
pocos, que crean en Mis grandes ansias de bien para
ustedes?
31) Al hablar de Mis Apóstoles de entonces, pienso
en ustedes, los presentes. A todos se les ha concedido
tener parte Conmigo. Puesto que en cada uno de los
doce veía la multitud que los habría de seguir y por
lo mismo amaba a los que había elegido con
predilección infinita.
32) Fíjense en Pedro, por ejemplo y miren después
de él, la hilera de Santos Pontífices que lo han
seguido. Pues bien, por el pobre pescador, por la
piedra que puse como fundamento de Mi amada
Iglesia, He vivido días y noches de oración, de
dedicación y de entrega. Sé muy bien lo que significa
ser Mi Vicario, hacer Mis veces en medio, tomar
sobre sí la inmensa responsabilidad de custodiar Mi
grey. Por eso di a Pedro grandes dones, le hice
experimentar Mi Omnipotencia para que sus débiles
fuerzas no fueran obstáculo a Mi obra.
33) También los demás tuvieron mucho amor por Mí y Juan fue el único de los doce que poseyó la virtud
tan grata a Mí y que conservé, milagrosamente, en
Mi Madre después de haberme engendrado; y
precisamente por esa virtud dejé a Juan hacer Mis
veces, con María, después de Mi muerte.
34) Son muchos los que no pueden entender esta
preferencia Mía por los célibes, pero un día se verá cuánta sombra arroja en el alma la sensualidad… Les
hago saber que, quien logra liberarse de la
sensualidad por agradarme a Mí, tocará las cimas
más elevadas que las que se conceden a los célibes… ¡Cuánta miseria, cuántas tristezas para los hombres,
a causa del pecado de la impureza!
35) La principal razón por la cual Yo enseñé y
enseño hoy el desprecio de las cosas mundanas, está en el peligro de que el hombre pueda perderse con el
apego a ellas.
36) Hijos Míos casi al finalizar esta convivencia, esta
comunión con ustedes, debo asegurarles que He
resuelto todas las cosas de Mi vida con la luz
racional, si eran transitorias; y divina, si se trataba de
cosas pertenecientes a Mi misión.
37) Pero todo estaba guiado por el Espíritu y todo lo
resolvía en pleno acuerdo con Mi Padre. Su Voluntad
es precepto de tranquilo crecimiento y todas las
adversidades no deben ser entendidas como
Voluntad absoluta del Padre, sino relativa.
Efectivamente, los obstáculos naturales y
extranaturales no habían sido predispuestos por el
Padre cuando los creó. Si subsisten, se debe ante todo
al pecado de Adán y Eva y luego a sus mismos
pecados. Por ello Mi Padre quiere las dificultades por
Justicia, pero sobre todo por Misericordia.
38) El sentido práctico que se debe tener en tales
circunstancias consiste en tomar de Mí cada cosa y, al
mismo tiempo, remediar en lo posible las cosas
adversas.
39) Recuerden que en la última cena dije a Judas que
hiciera pronto lo que quería hacer. Le dije para
salvarlo de las iras de sus hermanos, de Mis demás
Apóstoles. Por tanto, por Misericordia. El estaba
decidido, no se habría vuelto atrás, por lo cual lo más
práctico era alejarlo del peligro de ser descubierto. Lo
ayudé a escapar, eso es todo. ¿Podían suponerlo
ustedes? ¡Ah, cuando conozcan este Corazón, qué
maravillas deberán hacer!
40) La otra cosa importante para vivir bien en la
tierra es la buena voluntad. Pues para ésto les digo
que Me imiten en ésta o aquella cosa que hice, ya que
todas fueron de buena voluntad. Camino áspero es la
adquisición del buen querer, pero después de
muchas y prolongadas pruebas pueden tener la
buena voluntad que Yo deseo.
41) A todos ustedes, Mis amados, un triple abrazo,
un beso fraterno y la invitación a meditar, con
serenidad y humildad, Mis Palabras.
42) He querido relatarles en apretada síntesis, la vida
del Hombre que nació, vivió, sufrió, murió y resucitó por ustedes, por cada uno en particular, no porque
alguno lo merezca, sino por el inmenso amor al que
mueven quienes hacen un sacrificio por estar
Conmigo, por reunirse en Mi Nombre, por compartir
con Mi Espíritu que los ha llamado, el amor y
generosidad entre ustedes.
28-Mar-97 (Amanecer del Viernes Santo.)
43) Mi dulce niña, Me dices que tienes sueño, como
rogando que te conceda un descanso… ¿Qué crees
que han sido Mis noches pasadas insomne en unión
con Mi Padre? Fueron noches de oración, de
sufrimiento y también Yo quedaba cansado, créeme.
44) Si ahora te mantienen despierta Mis trabajos o lo
que llamas tus achaques, agradéceme porque Me
sirvo de ésto para volcar en ti y en muchos, ríos de
luz, torrentes de Gracia.
45) ¿Tienes sueño? Sí, es un regalo Mío también el
sueño. Anda, descansa un poquito, pero permanece
despierta en Mí…
|
|