VUELA LA FE
Un joven que fue criado como ateo estaba entrenando para Salto Ornamental a nivel olímpico. La única influencia religiosa que recibió en su vida, le llegó a través de un amigo cristiano. El deportista no prestó mayor atención a los sermones de su amigo, aunque los escuchaba con frecuencia.
Una noche, fue a la piscina de la Universidad a la que pertenecía. Las luces estaban todas apagadas, pero como la noche estaba clara y la luna brillaba, había suficiente luz para practicar.
El joven se subió al trampolín más alto y volvió la espalda a la piscina al filo de la rampa y extendió sus brazos, vio su propia sombra en la pared. La sombra de su cuerpo tenía la forma exacta de una cruz.
En lugar de saltar, se arrodilló y finalmente le pidió a Dios que entrara en su vida.
Mientras el joven permanecía quieto, el personal de limpieza ingresó y encendió las luces. Habían vaciado la piscina para repararla.
Sí, ...yo amo a Jesús.
Él es mi fuente de existencia y mi Salvador. Me mantiene funcionando cada día de mi vida.
Sin Él, no sería nada. Sin Él, soy nada, pero con Él..., "Todo lo puedo en Cristo que me sostiene" (Fil. 4:13)
Ésta es la prueba más simple que existe: si amas a Jesús y no te avergüenzas de las cosas maravillosas que ha hecho Él por ti.
¡ Que Dios te bendiga !
Cuando naciste, estabas llorando y todos
alrededor tuyo sonreían. Vive tu vida de tal
manera, que cuando mueras, tú seas el que esté
sonriendo y todos alrededor tuyo estén llorando.